Framing co-productive conservation in partnership with Arctic Indigenous peoples

Indigenous communities at the frontlines of climate change and biodiversity loss are increasingly shaping the conservation of lands, waters, and species. The Arctic is a hotbed for emerging local, national, and international conservation efforts, and researchers, managers, and communities alike will benefit from a framework that improves approaches to Indigenous partnerships. Co-productive conservation is a framework that encompasses both the co-production of knowledge and the co-production of public services to pursue ethically conscious, culturally relevant, and fully knowledge-based approaches to biodiversity concerns. Co-productive conservation recognizes that conservation can be practiced in a way that embodies Indigenous perspectives, knowledge, rights, priorities, and livelihoods. Six iterative and reflexive co-production processes (i.e., co-planning, co-prioritizing, co-learning, co-managing, co-delivering, and co-assessing) focus on the human dimensions that allow research ,management, and conservation to affect change. By opening discussions on how to structure conservation efforts in partnership with Indigenous communities, the conservation community can move away from narratives that perceive Indigenous participation as an obligation or part of an ethical narrative and instead embrace a process that broadens the evidence base and situates conservation within Indigenous contexts.

Indigenous-led conservation, Indigenous partnerships, Indigenous knowledge, co-production of knowledge, co-management, Arctic, traditional ecological knowledge

Las comunidades indígenas en la primera línea del cambio climático y pérdida de biodiversidad
están configurando cada vez más la conservación de tierras, aguas y especies. El Ártico es un semillero de esfuerzos emergentes de conservación locales, nacionales e internacionales,
y los investigadores, gestores y comunidades se beneficiarán de un marco de referencia que mejora las estrategias para las alianzas Indígenas. La conservación coproductiva
es un marco de referencia que comprende tanto la coproducción de conocimiento
y la coproducción de servicios públicos para definir aproximaciones a problemas de la
biodiversidad que sean éticamente conscientes, culturalmente relevantes y plenamente
basadas en conocimiento. La conservación coproductiva reconoce que la conservación
puede llevarse a cabo de manera que incorpore perspectivas, conocimiento, derechos, prioridades y medios de vida Indígenas. Seis procesos de coproducción iterativos y reflexivos
(i. e., coplaneación, copriorización, coaprendizaje, cogestión, cocapacitación y coevaluación)
se concentran en las dimensiones humanas que permiten la investigación, gestión y conservación para inducir cambios. Abriendo discusiones sobre cómo estructurar los esfuerzos de conservación en alianza con las comunidades Indígenas, la comunidad conservacionista puede alejarse de las narrativas que perciben la participación Indígena como una obligación o parte de una narrativa ética y en su lugar adoptar un proceso que amplía la base de evidencia y ubica la conservación dentro de los contextos indígenas.

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